Ella ha vuelto. ¿Razones? Entre otras:
1. Porque Facebook ve caras, pero no corazones.
2. Porque por muy vertiginosa que sea su vida ésta no le da como para andar actualizando su estado en Twitter.
3. Porque es parte de ese 89,9% de periodistas que no tiene donde escribir cosas mínimamente coherentes.
4. Porque para ser escritora en este país hay que ser hippie o tener un apellido bonito, una de dos.
5. Porque necesita un blanco donde apuntar sus dardos (casi siempre venenosos).
6. Porque al final del día el Chile del Bicentenario le ha dado tanto material que le urge despotricar en alguna parte.
7. Y sí, porque también le gustan las luces, la parafernalia y el público.
1. Porque Facebook ve caras, pero no corazones.
2. Porque por muy vertiginosa que sea su vida ésta no le da como para andar actualizando su estado en Twitter.
3. Porque es parte de ese 89,9% de periodistas que no tiene donde escribir cosas mínimamente coherentes.
4. Porque para ser escritora en este país hay que ser hippie o tener un apellido bonito, una de dos.
5. Porque necesita un blanco donde apuntar sus dardos (casi siempre venenosos).
6. Porque al final del día el Chile del Bicentenario le ha dado tanto material que le urge despotricar en alguna parte.
7. Y sí, porque también le gustan las luces, la parafernalia y el público.
